El nabo crece como una planta herbácea de uno, dos años o perenne con alturas de estatura de 20 a 120 (rara vez a 200) centímetros. Las formas cultivadas (subsp. Vulgaris) casi siempre tienen dos años. Su raíz puede ser un nabo fuertemente engrosado, redondo o en forma de huso, de color rojo, blanco o amarillo, o puede ser delgado, fibroso y ramificado.