A pesar de servir muy bien como flor ornamental tanto en jardines como en macetas, la floripondio no es recomendable alrededor de hogares o sitios frecuentados por niños, ya que todas las partes de la planta contienen alcaloides de tropano, los cuales causan una intoxicación anticolinérgica: alucinaciones, desorientación, convulsiones y pueden llevar al coma, parálisis medular y eventualmente a la muerte. Su ingesta puede ser accidental, por ejemplo, una mujer coreana fue intoxicada por consumir el adorno de un plato de comida, que consistía en pétalos de flor de floripondio. La peligrosidad y severidad de los síntomas es elevada, pero afortunadamente, si se trata a tiempo, no resulta mortal.