Tepozán blanco es un arbusto resistente de porte denso y redondeado, conocido por sus hojas en forma de corazón. Altamente adaptable, florece en una gran variedad de condiciones, pero muestra preferencia por los suelos bien drenados. A finales del verano, tepozán blanco exhibe su valor ornamental con racimos de flores con aroma a miel que atraen a una plétora de polinizadores, creando un vibrante centro ecosistémico.