Habitual de ver cultivada como ornamental, y por otra parte cada vez más rara de encontrar creciendo salvaje, la teucrio (Teucrium fruticans) suele ser apreciada por sus flores y hojas aromáticas (características de una planta de la familia de las mentas, la familia Lamiaceae) para la formación de setos. Dada su cada vez mayor rareza, en Francia ya se la considera una especie protegida.