La viola bubanii es originaria de los bosques húmedos y las áreas montañosas, por lo que no tolera la sequía. No obstante, un exceso de riego hará que se pudra y se muera. Si la plantas en el jardín, riégala según las condiciones meteorológicas de forma que evites que el suelo esté excesivamente seco. En maceta, riégala bien cuando la superficie de la tierra esté seca.