Boj
Ya en la antigua Grecia y Roma, el boj era utilizado en jardinería para formar setos, demarcar espacios verdes y definir límites. El boj es una especie longeva que puede llegar a vivir 600 años, muy resistente y fácil de cuidar. En la naturaleza se lo puede encontrar en bosques de montaña y laderas rocosas. Sus flores son ricas en néctar y atraen a todo tipo de insectos, pero sus frutos son tóxicos tanto para los humanos como para las mascotas.