¿Cuál es la mejor manera de regar mi Raíz-de-coral crestada?
La forma de regar la Raíz-de-coral crestada dependerá en cierta medida de si la planta está o no en fase de crecimiento activo. Si es así, deberá aplicar agua a la tierra de la planta y, si el tiempo es cálido, realizar riegos ocasionales por encima de la cabeza para permitir que la planta absorba la humedad a través de sus hojas. Por el contrario, en invierno, y cuando el tiempo es fresco o húmedo en general, debes limitarte a regar directamente la tierra en lugar de incluir también el riego por aspersión. Sabrás que tu Raíz-de-coral crestada necesita más agua si sus raíces y hojas se vuelven delgadas y secas o muestran decoloración. Raíz-de-coral crestada recibe demasiada agua tendrá un aspecto blando y mustio. Debes cultivar tu Raíz-de-coral crestada en una maceta y asegurarte de que la mezcla para macetas que utilices tenga un drenaje fantástico. Durante la temporada de crecimiento, deberá regar esta planta varias veces por semana. Sin embargo, cada riego debe drenar rápidamente a través del medio de cultivo para evitar que quede agua estancada. La cantidad de agua dependerá del tamaño de la maceta. Por lo general, las macetas un poco más grandes necesitarán un riego menos frecuente, mientras que las macetas más pequeñas necesitarán un riego un poco más frecuente. El agua de lluvia y el agua destilada son los mejores tipos de agua para esta planta, y lo mejor es que el agua que utilice se ajuste lo más posible a la temperatura del aire.
¿Qué debo hacer si riego demasiado o demasiado poco mi Raíz-de-coral crestada?
Dejar la Raíz-de-coral crestada en un suelo demasiado húmedo durante demasiado tiempo es una de las formas más comunes de matar esta planta. Aunque estas plantas necesitan agua con frecuencia durante su crecimiento activo, también necesitan vivir en un medio de cultivo que drene el agua rápidamente. Cuando esta planta se riega en exceso, se vuelve blanda y se pudre la raíz. Si esto ocurre, debes estar preparado para cortar con unas tijeras de podar estériles las raíces que muestren signos de podredumbre. Una vez hecho esto, trasplante su Raíz-de-coral crestada y asegúrese de que el recipiente permite el drenaje y de que lo rellena con una mezcla para macetas de drenaje rápido. Sin embargo, Raíz-de-coral crestada no suele reaccionar bien a un trasplante excesivo, por lo que es fundamental regarla correctamente. Si se riega demasiado poco, Raíz-de-coral crestada empezará a marchitarse y a sentirse seca al tacto. Si esto ocurre, es probable que se deba a que la tierra se está secando más rápido de lo esperado, lo que significa que debe aumentar la frecuencia de riego.
¿Con qué frecuencia debo regar mi Raíz-de-coral crestada?
Durante la fase de crecimiento activo, que abarca los meses de primavera y verano, debe regar su Raíz-de-coral crestada una o dos veces por semana, aumentando ese ritmo a tres veces por semana o más en caso de largos periodos de tiempo caluroso y seco. En invierno, también tendrá que regar su Raíz-de-coral crestada, pero no tanto. Una frecuencia de riego de dos a tres veces al mes debería bastar para mantener viva su Raíz-de-coral crestada durante los meses más fríos. Sin embargo, si mantiene su Raíz-de-coral crestada en interior durante el invierno, debe tener en cuenta que los lugares de cultivo en interior pueden hacer que la tierra se seque más rápido de lo habitual, lo que puede significar que necesite aumentar el número de riegos mensuales. Puede aprovechar el otoño para reducir gradualmente la frecuencia de riego desde el ritmo estival de varias veces por semana hasta el programa de riego reducido de invierno.
¿Qué debo tener en cuenta a la hora de regar mi Raíz-de-coral crestada en las distintas estaciones y periodos de crecimiento?
Hay dos fases de crecimiento importantes que debe tener en cuenta a la hora de planificar el calendario de riego de su Raíz-de-coral crestada. La primera de ellas es el período de crecimiento activo, que tiene lugar en primavera y verano, y que exige regar la planta varias veces por semana. El segundo periodo importante de crecimiento es el periodo de reposo que la Raíz-de-coral crestada debe experimentar durante unos dos o tres meses al año, durante el invierno. Durante ese tiempo, la planta necesitará mucha menos agua y abono de lo normal. Riegue una o dos veces al mes durante este tiempo. Durante el otoño, debería empezar a reducir gradualmente la frecuencia de riego de varias veces por semana hasta llegar a la frecuencia de una o dos veces al mes que es apropiada para el invierno.
¿Cómo debo regar mi Raíz-de-coral crestada de forma diferente si lo cultivo en interior?
La Raíz-de-coral crestada requiere un entorno de cultivo relativamente húmedo. Por desgracia, la mayoría de los cultivos de interior carecen del nivel de humedad que esta planta prefiere. Esto hace que la planta y su tierra se sequen más rápidamente que en el exterior. Para combatir este efecto, es posible que quieras incluir un humidificador en la habitación donde cultivas tu Raíz-de-coral crestada. También es posible que tengas que regarla con más frecuencia. Sin embargo, aunque las Raíz-de-coral crestada prefieren la humedad, también necesitan una circulación de aire adecuada para evitar la acumulación excesiva de humedad y las enfermedades que puede provocar. Considere la posibilidad de instalar un ventilador en la habitación donde cultive esta planta para garantizar una circulación de aire adecuada.
¿Cuántas horas de sol necesita Raíz-de-coral crestada para crecer?
Raíz-de-coral crestada necesita entre 3 y 6 horas diarias de luz solar directa para desarrollarse. Sin embargo, también necesita algo de sombra durante las horas más calurosas del día para evitar los daños del sol. La luz solar matinal es ideal para Raíz-de-coral crestada, pero también puede tolerar algo de sol por la tarde si la temperatura no es demasiado alta. Para conseguir el equilibrio perfecto de luz solar, intente plantar Raíz-de-coral crestada en una zona que reciba sol parcial, como debajo de un árbol o en el lado este de un edificio.
¿Qué ocurrirá si Raíz-de-coral crestada no recibe suficiente luz solar?
Si Raíz-de-coral crestada se expone a demasiada luz solar directa, sus hojas pueden amarillear, secarse o incluso quemarse. También es posible que la planta se marchite o se atrofie. Para evitar los daños causados por el sol, asegúrate de dar sombra a Raíz-de-coral crestada durante las horas más calurosas del día. Puedes utilizar una tela de sombra o plantar Raíz-de-coral crestada cerca de plantas más altas que puedan proporcionar algo de sombra natural.
¿Qué ocurrirá si Raíz-de-coral crestada recibe demasiada luz solar?
Si Raíz-de-coral crestada no recibe suficiente luz solar, puede crecer alta y larguirucha, con escaso follaje. Las hojas también pueden volverse amarillas o verde pálido, lo que indica que la planta no está produciendo suficiente clorofila debido a la falta de luz solar. Para remediarlo, intenta trasladar Raíz-de-coral crestada a un lugar más soleado, o poda el follaje cercano para que llegue más luz a la planta.
¿Cuál es la temperatura óptima para Raíz-de-coral crestada?
La mejor temperatura para Raíz-de-coral crestada depende de la época del año. Hay dos estaciones principales en las que se debe tener en cuenta la temperatura: la estación de crecimiento y la estación de reposo vegetativo. Durante la temporada de crecimiento, una vez que Raíz-de-coral crestada ha empezado a brotar, la temperatura ideal debe oscilar entre 65~80℉(18~27℃). Si hace menos de 15℉(-10℃), la planta sufrirá; sus hojas se pondrán marrones y se marchitarán, pero si se trata de una ola de frío breve, Raíz-de-coral crestada podrá sobrevivir con algo de ayuda. Durante las épocas más cálidas del año, Raíz-de-coral crestada necesitará una protección similar contra las temperaturas demasiado altas. 95-105℉ (35-40℃) es el límite superior del rango de temperaturas de esta planta, y todo lo que supere este límite pondrá en peligro la integridad del follaje y las flores de Raíz-de-coral crestada. Las temperaturas más altas pueden causar marchitamiento, caída e incluso quemaduras solares en las hojas, de las que Raíz-de-coral crestada puede recuperarse con dificultad. Hay varias formas rápidas y sencillas de combatir este problema.
Requisitos de temperatura para el primer año o plantón Raíz-de-coral crestada
Si éste es el primer año que su Raíz-de-coral crestada crece en el exterior como planta nueva, es posible que necesite más cuidados durante los meses más fríos del año. Las heladas no solo pueden dañar más gravemente a una Raíz-de-coral crestada de primer año, sino que también pueden impedir que vuelva a crecer como una planta sana en primavera. Esta planta debe mantenerse a una temperatura de 40℉(5℃) o superior cuando aún no está establecida, lo que puede hacerse metiendo la Raíz-de-coral crestada en el interior durante uno o dos meses, o colocando mantillo o barreras de tela que la protejan de las heladas. También es una buena idea plantar Raíz-de-coral crestada en un lugar más sombreado durante el primer o segundo año, ya que las plantas más pequeñas y débiles tienen más dificultades para mantener su propia temperatura con el calor. El primer año, Raíz-de-coral crestada no debe recibir más de cinco horas de luz solar directa al día, sobre todo si la temperatura ambiente diurna supera los 80℉(27℃). La tela de sombreo y el riego frecuente o la nebulización son las claves para controlar el calor estival.
¿Cómo puedo proteger Raíz-de-coral crestada de las temperaturas extremas?
Si las temperaturas son bajas (inferiores a 15℉(-10℃)) durante el período vegetativo, puede tomar algunas medidas para proteger Raíz-de-coral crestada de las heladas o los daños causados por el frío. Si cultivas Raíz-de-coral crestada en un contenedor, puedes colocarlo en el interior, con luz indirecta y brillante, hasta que las temperaturas vuelvan a superar el umbral inferior. Otra opción más adecuada para Raíz-de-coral crestada plantada en el suelo es utilizar mantillo o tejido hortícola para crear una barrera aislante alrededor de la planta, que la protegerá de las heladas y del viento frío. Para temperaturas superiores a 80℉(27℃) a la sombra durante el día, procure exponer Raíz-de-coral crestada sólo a seis horas o menos de luz solar al día, preferiblemente por la mañana. Colocar una tela de sombreo, o una fina malla de plástico, puede ayudar a reducir la cantidad de luz solar directa que incide sobre la planta durante las horas más calurosas del día. También puede instalar un sistema de nebulización que permita una liberación lenta de vapor refrescante alrededor de la base de la planta durante el día para reducir las temperaturas del suelo.
Recomendaciones de temperatura en la temporada de letargo para Raíz-de-coral crestada
Durante los fríos meses de invierno, Raíz-de-coral crestada necesita cierto grado de frío para permanecer en letargo hasta que llegue el momento de brotar. Brotar demasiado pronto, es decir, antes de que pase el peligro de la última helada, puede ser fatal para Raíz-de-coral crestada, sobre todo si ya tiene ventaja cuando llegan las heladas. Lo ideal es que las temperaturas invernales se mantengan por debajo de 32℉(0℃), pero si llegan a 40℉(5℃), todo irá bien. Un periodo de calor inesperado durante los meses fríos, que puede ocurrir en climas más templados como las selvas tropicales, puede desencadenar un brote prematuro de Raíz-de-coral crestada. En este caso, si todavía hay peligro inminente de heladas, puedes probar a cubrirlo con plástico transparente sobre estacas para que el frío tenga menos posibilidades de dañar el nuevo brote. Este montaje puede retirarse cuando haya pasado el peligro de heladas. Ocasionalmente, Raíz-de-coral crestada podrá rebrotar en el momento adecuado sin ninguna ayuda, pero este método aumenta las posibilidades de éxito de una segunda brotación.