Soluciones: Si el amarilleo y el secado de las hojas y flores es una progresión natural debido a la edad, no se puede hacer nada para retardar o detener el proceso. Una vez que las hormonas dentro de la planta comienzan el proceso de senescencia, es irreversible.

Soluciones: El primer paso para tratar la planta es erradicar los insectos que segregan la sustancia melaza. Inspecciona visualmente la planta en busca de insectos, asegurándote de mirar en la parte inferior de las hojas y en la entrepierna de las ramas. Los insectos que pueden estar presentes son: Los pulgones son insectos minúsculos en forma de pera. La mayoría son de color verde. Las moscas blancas son de color pálido, casi translúcidas y están cubiertas con una cera blanquecina en polvo. Pueden parecer diminutas polillas blancas. Las escamas aparecen como pequeñas protuberancias marrones adheridas a las hojas y ramas, con una capa blanda o blindada. Las cochinillas son pequeños insectos blancos que parecen algodón. Para tratar la infestación de insectos, sigue estos pasos: Quita los insectos manualmente si la infestación es menor. Limpia las hojas de las plantas suavemente con un paño limpio y húmedo o rocía con un chorro de agua con la manguera para desalojarlas. Trata con jabón insecticida o aceite de neem para infestaciones graves. Los ácidos grasos de los jabones insecticidas sofocan a los insectos de cuerpo pequeño. El aceite de neem es un pesticida botánico común que bloquea las hormonas que hacen que los insectos pasen de larva a pupa y a adulto, deteniendo el ciclo de vida del insecto. Una vez que se haya tratado la infestación de insectos, retira la mayor cantidad posible de moho de las hojas. El moho restante se secará debido a la falta de melaza y se caerá de la planta. Lava con jabón insecticida o lavavajillas muy diluido. Si es posible, aplícalo un par de horas antes de que se pronostique lluvia. El jabón ayudará a suavizar el hollín y facilitará su enjuague. Rocía las plantas con un chorro constante de agua.

Soluciones: Inspeccione los árboles frecuentemente, y retire cualquier rama infectada cuanto antes. El tizón de fuego no puede ser curado, por lo que el único tratamiento es podar el árbol con cuidado y fijarse cuidadosamente en los signos de enfermedad. Todas las partes afectadas de la planta deben ser retiradas, ya que la plaga puede sobrevivir durante el invierno dentro de los tejidos del árbol. La plaga puede volverse sistémica en el árbol. En ese caso, la planta entera debe ser retirada para no convertirse en hospedadora del patógeno y para evitar la extensión.

Soluciones: La solución para el marchitamiento general de la planta, dependiendo de la causa de este, puede ser: Ajustar el riego para garantizar que la tierra alrededor de la planta no esté nunca ni completamente seca ni sobresaturada de agua. Podar el follaje muerto, regar y fertilizar ligeramente para animar a la planta a producir nuevo crecimiento. Trasladar la planta a un lugar adecuado, ya sea incrementando o reduciendo su exposición al sol. Reducir la aplicación de fertilizantes, sobre todo replantando en macetas nuevas con tierra nueva aquellas plantas en maceta que sufran por esta causa. Esperar a comienzos de la primavera, por si el marchitamiento se debe al comienzo del invierno. Abstenerse de regar, o regar en muy baja cantidad, mientras las temperaturas sean bajas o estén por debajo del punto de congelación.